Estoy un poco cansada de cierto paripé que se está montando alrededor de esto de emprender.
Sí, he dicho paripé, porque empieza a serlo.
Este post es para ti si estás empezando o, si ya estás en ello, y la cosa no acaba de funcionar.
No quiero que tú te creas el paripé.
La gota que colmó el vaso, fue que el otro día me apunté a un webinar.
La temática que iba a tratar me parecía interesante.
Sabía que era una acción promocional de un nuevo lanzamiento que iba a sacar esa persona, pero no me importaba, al contrario, si valía la pena, yo encantada de adquirir un curso interesante.
Resumen del contenido del webinar:
He facturado casi 100.000 euros en una semana… blablablá… si tú no lo estás haciendo es porque no quieres… blablablá… podrías estar de vacaciones en la playa en lugar de estar trabajando… blablablá… compra mi curso ahora.
En resumen, que si estás trabajando como un burro para sacar tu negocio adelante, es porque tú lo has decidido así.
Si estás emprendiendo, posiblemente estés en una situación similar a esta:
[dt_list style=”1″ bullet_position=”middle” dividers=”false”][dt_list_item image=””]Semanas de trabajar de 60 horas (para arriba)[/dt_list_item][dt_list_item image=””]Sacrificios varios (sí, hay que pagar un precio gordo)[/dt_list_item][dt_list_item image=””]Ponerte a prueba constantemente[/dt_list_item][dt_list_item image=””]Y al límite[/dt_list_item][dt_list_item image=””]Que tus amigos ajenos a este mundo te miren con cara de asombro cuando te ven desquiciado[/dt_list_item][dt_list_item image=””]Tu ánimo y motivación es una montaña rusa. Tanto puedes estar on fire como profundamente deprimido en el transcurso de una única hora[/dt_list_item][/dt_list]
Y miras afuera (en redes sociales normalmente) y a todo el mundo le va genial, todo el mundo viaja, todos los emprendedores están facturando un montón y todos hacen un trabajo memorable y estupendo.
Y te sientes mal, claro. Te preguntas qué es lo que estás haciendo mal, o si es que tú no vales.
Lo que no quiero es que te veas trabajando un sábado y te sientas un pringui.
O que un mes estés comiendo espaguetis con tomate de bote ya el día 10, y te sientas que eres menos.
O que veas que el egoblogger del turno está de nuevo de viaje por Hawai y vayas directo a coger el helado para meterte 3 días debajo de la manta.
Porque sí, amigo, esto de emprender, es un camino que vale la pena, pero es muy duro, a veces cuesta arriba y, desde luego, hay que trabajar un montón.
Todo aquel que te diga lo contrario MIENTE.
Así de claro.
OJO, una aclaración antes de seguir: con este post no me estoy refiriendo a nadie en concreto, es una percepción general. De hecho, ya ni recuerdo el nombre del tío del webinar. Sería bastante estúpida si atacase a alguien en concreto, así, de forma gratuíta, porque no conozco personalmente a las personas que “pintan las cosas de rosa”. Sino, qué fácil sería ponerse a rajar de “fulanito” o “menganito” a base de teclear, ¿verdad? Así que no, no se trata de eso. No tengo a nadie en mente al escribir estas palabras.
Y no: tampoco estoy criticando las formaciones online, al contrario, benditas sean. No es que haya hecho demasiados cursos online yo (soy más de cosas presenciales), pero me parece que el hecho de que sean accesibles a cualquiera desde cualquier parte del globo y que todo el mundo tenga la opción de compartir su conocimiento de una forma asequible, es lo más. Y conozco personas geniales (ahí sí, personalmente) que lo están haciendo muy bien y con toda la humildad del mundo.
Hablo de una burbuja general en torno a los emprendedores y, más en concreto, emprendedores digitales, con gran presencia online (como puedo ser yo).
¿Te suena esta estampa?
Siempre me pregunto si la Wifi les llega con la brisa marina…
Yo estoy un poco aburrida de ella, la verdad.
Promesas de vivir trabajando un ratito al día desde la playa (nada, un momentito que te conectas para ver cuántos millones has ingresado ese día) que, a mí, me parecen peligrosas.
Porque, si me he animado a escribir este post, es porque llevo ya un tiempo hablando con gente (algunos clientes, otros no), que me llegan perdidísimos… y eso me preocupa.
Personas que están empezando o quieren empezar con su negocio y se plantean estas metas, porque ven que lo pintan como accesible para cualquiera…
… y claro, cuando ven que pasa el tiempo, y el momento tumbona no llega, piensan que son unos fracasados, o que su idea no es buena… que el problema está en ellos.
Se sienten muy pringuis.
Entonces hay 2 opciones:
A/ Quedarse a vivir debajo de la manta y alimentarse a base de helado derretido
B/ Unirse a un postureo raruno, en el que “a ti también te va estupendamente” y haces como que también facturas 100.000 euros en una semana… y que si no estás en la playa ahora mismo, es porque no quieres
Si escoges la opción A, te sentirás un pringui y pensarás para siempre que eres un fracasado y que el problema lo tienes tú. Asumes que “es tu culpa”.
Si escoges la opción B, te sumas a la ola de “soy uno más” y empiezas a copiar estrategias al pie de la letra, incluso textos casi literales de otros… casi montando un negocio similar al de la mayoría.
¿En serio es eso lo que quieres?
Obviamente, trabaja para no tener que trabajar un sábado (valga la redundancia) y para tener una vida cómoda y holgada de la que disfrutar. Es obvio que todos nos hemos metido en este berenjenal para vivir mejor y no peor… pero de verdad, permanece atento para filtrar lo que es adecuado para ti y lo que no.
Trabaja para ser diferente, para tener un proyecto que aporte valor. Compartir en X
Estoy preocupada por la forma poco realista que está tomando todo esto del “emprender” online.
Porque a mí ya me da igual, que ya sé cómo funciona esto porque he aprendido a base de palos… pero escuchando hablar a mis clientes, gente con grandes ideas que están totalmente desilusionados porque se esperaban que “esto sería de otra manera”… no me gusta nada. Así que algo tenía que hacer.
Ayer hablaba sobre elefantes rosas, esos que están en medio de la habitación y que nadie quiere mencionar. Cosas que tenemos delante, ocupando mucho sitio y que nadie quiere hablar de ellas. Porque no interesa, o porque da palo.
Creo que este tema es un gran elefante rosa.
Así que he decidido grabar un vídeo dando mi perspectiva sobre todo esto. A ver qué opinas tú.
El Antipost: Lo que nadie se atreve a contarte sobre emprender Compartir en X
Ya sé que salgo muy seria en el vídeo (no fue intencionado) pero es que este tema es serio.
No hay atajos. Hay ciertos aprendizajes que uno debe vivir. Y, emprender, está lleno de ellos. Pueden contarte cuáles son para prevenirte y que, cuando lleguen, sepas cómo gestionarlos. Pero vas a pasar por ellos sí o sí. Ningún método mágico, rápido e indoloro va a ahorrártelos.
No los hay. Lo siento.
Como te digo en el vídeo, tienes que ser TÚ el que sea auténtico, que actúe según su forma de ver las cosas.
Porque esto de emprender vale muchísimo la pena… pero siempre y cuando, se coja con el enfoque adecuado.
El tuyo.
¿Qué te ha parecido? ¿Te has sentido alguna vez un pringui? ¿Te identificas con la estampa de acceder a la tumbona en la playa de forma asequible?
Me encantará conocer tu opinión.
Imágenes via Shutterstock
Ayy Marta, tienes razón! Yo también me canso del postureo ese de todo es genial, he trabajado mucho para emprender pero ahora ya lo tengo controlado y me dedico a vivir…instagram está lleno de emprendedores así, y la verdad …cada día entro menos
Las redes sociales están bien, siempre y cuando sepamos filtrar… Tú que trabajas tanto por tu negocio ya igual estás “prevenida”, pero hay tanta gente que aun no… Imagino que te tocará las narices! Muchísimas gracias por tu comentario! 🙂 Un abrazo Pilar
¡Qué bueno Marta!
Yo también me pregunto lo mismo cada vez que veo la imagen de la chica/o en la playa con el ordenador.
Ahí no llega el wifi y con “la ventolera” el portátil se te llena de arena a la mínima jajajaja
Si que es peligroso sí, más que nada porque provoca que el resto se sienta inferior.
Un abrazo
Jaja… sí, lo de las arenas es otro tema… 😉 Claro, puede llegar alguien que empiece y se sienta “poco” al ver que está a años luz de esa situación… ¿y cuántos proyectos buenos pueden quedarse en nada por tener una idea equivocada? Muchas gracias por tu comentario Elena. Un abrazo grande!
Lo de la arena siempre lo he pensado yo. “No me llevo el portatil a la playa ni loco” aunque pudiera, jeje.
Sí… jaja… no parece muy práctico. Como para quedarte sin batería y tener que correr a por el cargador XD
Ole, Ole y Ole por este post Marta.
Aquí una emprendedora “tradicional”, bueno ya son 4 años del proyecto, así que no sé si me clasifico de emprendedora o ya soy una simple autónoma pringada 🙂
Con un negocio que marcha más o menos bien, pero que no me permite estar tumbada en Maldivas, aunque me dedico al turismo jajaja y aprendiendo de blogging, rrss y todo lo necesario para lanzarme con otra idea al mundo digital y últimamente veo tantos “casos de éxito” que se alcanzan sólo pagando varias formaciones, un mentor o x que ya me astragan y generan en mi el efecto contrario y en lugar de animarme a hacer ese curso, pagar esa mentoría, seguir ese sistema hacen que lo rehuya.
Bueno, vamos a seguir trabajando y luchando por nuestro objetivo, y avanzando a pasito lento pero seguro.
¡Besotes!
Acaso hay diferencia entre “emprendedora” y “autónoma pringada”?? Bromas aparte, no sé si hay “sistemas”, ni si es necesario pagar una mentoría… básicamente porque yo no lo he pagado y, si hay gente que lo hace imagino que funcionan! Lo que sí sé es que no hay formas mágicas de llegar a las cosas y de construír un proyecto único, que el camino es currárselo como bien has hecho tú. Gracias por tu comenatrio!! Un abraciño
Grandísimo post, Marta!
Cuántas verdades dices en un post. Yo he dejado ya de leer y seguir a todos esos VENDE HUMOS, ya que todo este tema me tiene bastante quemado últimamente.
Enhorabuena por tu valentía. Has dicho lo que muchos piensan y casi nadie se atreve a decir (yo publiqué un post parecido en mi blog hace no mucho).
Un abrazo!
Gracias Max!! Supongo que habrá de todo, como en todas partes, “vende humos” y los que no. No sé catalogar quién es quién 😉 Lo que sí, es que esa “filosofía de la tumbona” está haciendo taaaanto daño y está creando tanta frustración en tanta gente… que ha dejado de hacerme gracia. Gracias por pasarte por aquí!! Un abrazo grande
Genial el post y vídeo de hoy Marta! Me encanta que trates este tema porque a veces uno se siente como “¿Pero que estoy haciendo mal?” y en realidad no se trata de eso. Hay muchas cosas que no vemos de la trastienda de un negocio, por tanto, hacerte una idea real viendo la superficie es imposible.
Y sobre lo comentas de copiar, ni te cuento… tengo un vídeo preparado para eso que está en edición. Puedes fusilar la web entera de alguien, sus procesos de venta e incluso las redes, pero te vas a delatar en cuanto te conozcan! La autenticidad se nota, y se huele 🙂
Gracias guapa! Sí, es normal. Por eso digo que tenemos que saber filtrar un poco, sino las redes sociales magnifican tanto todo que lo nuestro parece una broma. Lo de copiar… en fin, es que podría escribir una saga de posts al respecto con ejemplos para caerse del susto… Ellos son quienes llegan las de perder, nunca he visto prosperar un negocio que se haya dedicado a ir copiando. No tienen alma y, si trabajan tan bien como crean un negocio (mal, muy mal) pues ya me dirás. Un abrazo enorme!
Hola Marta.
Me alegro que hayas tocado el tema porque llevo 1 añito siguiendo a blogers y coincido contigo en que hay una burbuja de humo con todo esto de emprender.
Los servicios que ofrecen la mayoría son copias unos de otros, los clientes consumidores de estos servicios son los propios nuevos emprendedores, con lo que eso de que facturan esas cantidades no se lo creen ni ellos.
Se aprovechan de la incredulidad de la gente.
Hola Daniel!! Sí, un poco de burbuja sí que hay… y entre todos tenemos que explotarla! ¿De repente todo el mundo hace lo mismo? ¿Todo el mundo empieza y ya está en la cresta de la ola con una receta mágica que tienes que seguir tú también? No sé… me parece un poco “sospechoso”… Gracias por tu comentario, un abrazo 🙂
Me parece muy buena tu página, me he apuntado a varias similares, la tuya me gusta. Lo que dices es la realidad y el post es muy bien hecho, pero creo que NO hay muchos emprendedores manejando sus empresas como lo sugiere el cuadro. Ser emprendedor es dificil y está lleno de dificultades, lo bueno es que hay muchos que las han superado.
Oh, muchas gracias Guillermo! Sí que es difícil… pero no imposible!! Así que cada uno es responsable de encontrar su propia manera de hacer las cosas. Muchas gracias por tu comentario! Un abraciño
Hola Marta.
Primero decirte que me ha encantado el vídeo, eres de las pocas personas que han tenido el valor de hablar de este tipo de estado onírico que se ha creado con esto de los gurús blogueros y el emprendimiento. Te sigo desde hace aproximadamente un mes. Tu blog me ha sido muy útil en muchos aspectos, he seguido algunos de tus consejos, y como tu bien has dicho, lo estoy adaptado para que encaje con mi visión de las cosas.
Soy Diseñador web y llevo 3 meses trabajando en mi proyecto, he pasado por un montón de cosas, inseguridades, miedos y un montón de tiras y aflojas. Todo esto me esta llevando mucho trabajo y eso que todavía no he lanzado mi página web. Pero por encima de todo tengo algo muy claro, quiero vivir de mi pasión y no ser un alma en pena trabajando en un sitio en el que no aprovecho mis facultades.
Muchas gracias Víctor, me alegro que te haya gustado! Qué bien que te sirva las cosas que encuentras por aquí, de eso se trata. Me mando un enorme aplauso, por haber empezado ese camino de miedos, seguro que vale la pena. Es un camino en forma de montaña rusa pero muy emocionante. Así que muchísima suerte y a por todas!! Un fuerte abrazo 🙂
Ole, ole y ole… Aplausos de pie para ti y para el antipost, necesitamos más verdades gritadas a los cuatro vientos, y menos chapuceros. Ains si nos lo hubieran dicho antes, cuantas frustraciones nos habríamos ahorrado.
Un abrazo! 😉
Gracias! Qué bien que te haya gustado 🙂 Sí que puede traer mucha frustración, pero lo importante es seguir hacia adelante centrados en nuestro propio trabajo y en querer hacer algo diferente que realmente aporte algo útil. Gracias por tu comentario, otro abrazo de vuelta 🙂
Hola Marta,
¡Cuántas veces me ha pasado lo del súper-mega-espectacular webinar! Te prometen aprender lo que aún no sabes para que todo te funcione a las mil maravillas, pero… Obviamente, después no hay respuestas a tus preguntas. De hecho, para mí las respuestas siempre están en uno mismo. Porque, aunque puedes aprender los tecnicismos fuera y sobre muchos otros temas interesantes para gestionar tu negocio, después el que más conoce su negocio por dentro eres tú. Y necesitas adaptar esas enseñanzas a tus filtros.
No estoy de acuerdo con ese tipo de marketing pasivo-agresivo que se ha puesto de moda. Porque pienso en que, como consumidora, huyo de él. Así que lo que menos haría es hacer lo mismo a mi comunidad.
Me encanta que hayas hablado tan claro, porque creo que somos muchos los que también nos topamos con estas situaciones y nos identificamos con lo que cuentas.
Un saludo enorme.
Qué buena reflexión Conchi, con eso de que las respuestas siempre están en uno mismo… y no en un webinar!! Eso por supuesto 🙂 Lo que quería transmitir con toda esta parrafada era precisamente eso, que cada uno es el responsable de buscar esa fórmula y esa manera de hacer que es suya, nadie mejor para saber cuál es el camino adecuado. Independientemente del tipo de marketing que se haga (agresivo o no) a mí lo que me preocupa son las promesas desorbitadas que, a los que empiezan, pues pueden hacerles daño. 1000 gracias por tu comentario!! Un abrazo grande
¡Gracias, Marta, por este post!
Es una reflexión con la que coincido porque se está lanzando a todo el mundo a emprender como si esto fuera fácil. Como si un negocio se creara en 2 días. Como si cualquiera pudiera emprender.
La perseverancia es fundamental pero a veces no es suficiente.
Encantada de haber llegado hasta aquí no sé cómo.
Yo más que seria en el vídeo te veo serena.
Un placer, de verdad.
Un beso
Hola Lupe! Muchas gracias por tus amables palabras 🙂 Ya… fácil no es. Y creo que empieza a ser peligroso que se pinte como tal, muchas personas que empiezan pueden salir muy perjudicadas si se lo creen. Encantada de tenerte por aquí, un abrazo grande!
Hay Marta si es que no hay mejor forma de hacer las cosas que hacerlas a tu manera, adaptarlas a tu forma de ser y de ver el mundo. Los negocios para que funcionen deben ser cómo nosotros y aunque es cierto que puedes aprender mucho de las formaciones que se ofrecen online, también es cierto que necesitas del proceso de aprender a seleccionar. Debes curarte de ese consumismo frenético de consejos, de conocimientos, de consumo de procesos ajenos para reconocer que lo que funciona no es el sistema de los demás sino el tuyo propio, y para eso se requiere madurez empresarial, que no se consigue de un día para otro.
Hay un grupo de personas que hacen todo igual, pero afortunadamente hay muchas más personas sensatas, comprometidas con sigo mismas y coas sus proyectos que conseguirán brillar más allá de la playa. Lo cierto es que para ganar mucho dinero hay que trabajar duro, y no todos vamos a ganar mucho dinero, se trata de encontrar tu forma de vivir y de encajar en tu hueco, y los demás que digan lo que quieran.
Yo creo que si hay personas que cuentan la cara menos bonita de esto de emprender, aunque no interesa que se escuche ese mensaje, no solo porque no es glamuroso, sino porque la corriente de emprendimiento lo aconseja. Así que vivir no es fácil, ¿porque lo va a ser esto de emprender?
Gracias por este jarro de realidad tan necesario en el día a día.
Un abrazo
Gracias por tu reflexión Raquel!! Sí, hay muuuuchas personas delante de negocios honestos que han sabido encontrar su hueco y su forma de hacer las cosas… ¡menos mal! Cada uno puede contar la cara que prefiera, la buena, mala o las 2, faltaría más… yo, lo que veo preocupante es que se prometan fórmulas mágicas que no tienen que ver demasiado con la realidad…. Pero es verdad lo que dices que hay que pasar por el proceso de infoxicación, y luego, por el de desinfoxicación hasta encontrar “tu manera de hacer”. Desde luego, hay 1000 millones de formas de montar un negocio (por suerte) y a mí, estar en contacto con muchos tipos diferentes de empresa me hace conocer muchas realidades que me enriquecen. ¡Es algo que recomiendo a todo el mundo! Un abrazo Raquel
Se agradecen bastante estos post con tanta sinceridad y al grano,como debe de ser. Pienso que esos listos que venden estilo de vida a base de publicaciones en las redes sociales y pocos resultados reales y tangibles,son fruto de un gran sector de la población adicta al dinero fácil y con pleno consentimiento de ser engañada.Lo siento,pero lo veo así.Yo personalmente, llevo algunos años como autoempleado,espero ser libre financieramente en un futuro,esa es la verdad,y no voy vendiéndole tretas a nadie.Cómo bien dices,no existen fórmulas mágicas,ni siquiera una que le pueda valer a varios,cada uno ha de crearse la suya propia,es algo que le cuesta entender a los adictos a las formaciones, cursos y títulos,que en su búsqueda del secreto sólo pierden el tiempo porque no existe tal secreto.La mejor medicina para que gran parte de los falsantes de estilo de vida(que habrá un 1% que si lo tenga)desaparezcan,es dejar de exhaltarlos como si fueran lo máximo, pero es que eso es lo que se admira ahora precisamente. Así que gran parte de la culpa de que estos especimenes existan,la tenemos nosotros.Saludos!!
Gracias por tu comentario Javi y por compartir tu opinión. No sé si hay personas que venden cosas con “tretas”, supongo que esos cursos etc tendrán valor. Pero bueno, no tengo ni idea porque no soy usuaria de ellos, pocos cursos online he hecho en mi vida. Lo que me parece peligro son ciertos mensajes y, sobre todo, que la gente no sé de cuenta de que no hay recetas, sino que cada uno tiene que crearse la suya propia, ya que el que sigas la de otro no te va a garantizar tu éxito… y eso no quiere decir que seas un fracasado, o que tu idea no valga, sino que estás siguiendo unos pasos que no son los tuyos, Al menos eso creo yo. De nuevo, gracias por tus aportaciones. Un abrazo!