Siempre he sido bastante antisistema.
Por antisistema, me refiero a ir mucho a mi bola tratando de que no me afecte demasiado lo mal que funciona el mundo.
Tratar de que la presión social no me gane.
Y, sobre todo, tratando de no traicionarme a mí misma y a mis ideales.
Aunque, muchas veces, implique ir a contracorriente, como un jodido salmón.
Pero, ha llegado un momento en el que me siento cansada de cómo funciona el mundo.
Un mundo en el que hay que producir para los algoritmos y para las métricas.
De una vorágine desproporcionada de información y fake news.
Con un foco absoluto en el consumo de basura pro-dopamina.
El hartazgo es real.
Esta es una percepción que no solo me está pasando a mí, sino también a mucha gente que quiere sacar adelante sus proyectos con la mejor de las intenciones y aportando mucho valor.
Esa gente, al igual que yo, no queremos ser virales, sino que queremos crear algo interesante y valioso para otras personas.
No “interesante” como para que un algoritmo lo mueva.
No sé tú, pero yo no quiero ser esclava ni de un algoritmo ni de nada.
Ni que mi trabajo acabe siéndolo sin darme cuenta.
¿Qué me ha pasado entonces?
Que me estaba costando un poco encontrar el equilibrio entre crear algo genuino vs producir para el capitalismo.
Súmale a esto esta movida que tenemos la peña multipotencial de estar uniendo puntos todo el tiempo, tratando de procesar un montón de información sin parar.
Con esa capacidad, que es una bendición para muchas cosas, esta saturación constante, no nos beneficia en absoluto.
Pasamos de estar en modo aprendizaje y exploración a modo saturación que bloquea.
A tener el Mono Dispersor de nuestra cabeza dando botes a todo lo que da 🙊
Queremos salir a explorar y a aprender para sumar valor a nuestro trabajo y a cómo comunicarnos con nuestra marca personal, pero acabamos con saturación extrema a los 5 minutos.
Porque vivimos en un mundo que te atiborra a consumo para que ni pienses ni sientas demasiado.
¿Cómo vas a crear algo interesante si tu energía mental está pensando en cremas anticelulíticas o en valorar si cambio ya de coche o no?
¿Cómo vas a trabajar en proyectos que te llenen si estamos inmersos en un consumo que no fomenta el pensamiento crítico?
Tampoco está todo perdido… Creo
El mes pasado, en el Club privado, hablábamos del tema de la Visión.
Y el grupo llegó a una conclusión muy interesante, que es que, a veces, las personas que emprendemos, o que queremos crear proyectos que tengan un impacto positivo, tenemos una especie de presión por “salvar el mundo”.
Lo cual es paradójico porque, pudiendo aportar a este cambio con nuestro trabajo, esa presión nos bloquea hasta el punto de que no creamos lo que nos gustaría ni todo lo que nos gustaría.
La saturación es real, y pretendamos cambiar el mundo o no, la gente con tantas inquietudes como nosotros/as necesitamos que haya un desbloqueo mental que nos permita crear, fluir con nuestras propias ideas, investigar y hacer nuestros experimentos.
Salir de la saturación hacia el pensamiento crítico.
Dejar de estar adormecidos y buscar un equilibrio entre la exploración incansable y el consumo de información (a pesar de que justificamos esto como algo productivo) y subirle al pensamiento crítico y a la experimentación que te saque del bloqueo.
Así que quiero compartirte algunas cosas que a mí me están ayudando a encontrar (poco a poco) este equilibrio:
✅ Seleccionar fuentes primarias. Si quiero saber de la filosofía de Byung-Chul Han, me leo su libro, mejor que verme reels con refritos de otros reels hablando de lo que (supuestamente) dice este señor. De esta forma, yo misma puedo usar mi criterio y sacar mis conclusiones propias
✅ Seleccionar y acortar estas fuentes. Debido al punto anterior, no queda otra que seleccionar muy bien las fuentes, libros y artículos con las que voy a investigar y aprender para un proyecto concreto. Que esto sea algo finito, me obliga a ser súper selectiva, pero poder ir a lo profundo de los temas
✅ Plantear proyectos únicos. Últimamente me está ayudando mucho meterme durante (por ejemplo) una semana entera en un proyecto concreto (como Youtube, o cambiar la web) y poner foco absoluto en eso, en lugar de estar yendo a los poquitos en muchas cosas a la vez. A mi Mono Dispersor no le gusta, obviamente… y yo feliz
✅ Tener un espacio de creación. No me voy a extender en esto, porque ya hablé en FalconNews anteriores sobre este tema, pero básicamente es tener un lugar “sagrado”, por pequeño que sea, para trabajar sin distracciones
En mi pequeña cruzada a favor de crear Marcas Personales con sentido (sin pretensión por cambiar el mundo, ejem ejem) y que los perfiles multipotenciales no sientan que tienen “algo de malo”, sino que sus capacidades son más necesarias que nunca…
… puedo decir (y digo) que quizás no estemos cambiando el mundo de la forma estruendosa que se espera, pero siempre he creído que se pueden hacer grandes cosas desde lo pequeño, que nosotros/as nos podamos sentir realizados/as ayudando y aportando a otras personas con los mismos valores e ideales.
¿Qué puede haber más poderoso que mucha gente competente alineada con esto?
¿Qué puede ser más útil que el hecho de que nos desbloqueemos de una vez y comencemos a crear y a comunicar desde nuestro criterio propio?
Si quieres mantenerte al tanto de todas mis publicaciones apúntate a mi newsletter aquí